miércoles, 20 de abril de 2016

La mirada del uno



En este enlace podéis ver los vídeos:

Como decía Angelopoulos a través de uno de sus personajes, inmerso en una situación extrema: “Lo único que yo sabía era filmar a los otros sin que sus sentimientos me preocuparan”.
Una reflexión que le hace ver la vida desde otro punto de vista, el del otro. En ese momento se ve reflejado en los otros, ha adelantado esa frontera invisible que existe entre observado y observante, como si de un río se tratara y su cauce hubiera cambiado, acercándose a él, a veces secándose, desapareciendo, siendo capaz de ponerse en el lugar del otro.
La peculiaridad estriba en la unidad de esa duplicidad, denominada poder de identificación, es lo contrario del pensamiento que identifica y equipara todo a sí mismo; es la capacidad de hacerse igual al otro, a lo que sufre. Pero esta capacidad tampoco coincide con lo que se llama empatía. Tiene su lugar debajo del yo y de su rígida estructura, es una capacidad mimética, tan auténtica que provoca la aversión a toda apariencia de mimesis, a toda teatralidad. Tú eres capaz de transformarte realmente en otro, en otro ser vivo. Así como algunos perciben a los animales como personas y otros perciben a las personas como animales.
Como en la parábola de los puercoespines, de Schopenhauer, en la que en un día de invierno un grupo de puercoespines que se encuentran cerca sienten simultáneamente gran necesidad de calor. Para satisfacer su necesidad, buscan la proximidad corporal de los otros, pero mientras más se acercan, más dolor causan las púas del cuerpo del erizo vecino. Sin embargo, debido a que el alejarse va acompañado de la sensación de frío, se ven obligados a ir cambiando la distancia hasta que encuentran la separación óptima, la más soportable.
La idea que esta parábola quiere transmitir es que cuanto más cercana sea la relación entre los individuos, más probable será que se puedan hacer daño el uno al otro, al tiempo que, cuanto más lejana sea su relación, tanto más probable es que mueran de frío cálido.
En definitiva todos nos necesitamos, y buscamos esa distancia soportable que se aleja y se acerca dependiendo de nuestras carencias o nuestros excesos.

1 comentario:

  1. Sencillamente grande... Un artista de los que hay pocos en este país...

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